El país del Medio Oriente, Israel, suspende el uso de tapabocas obligatorio, gracias a la exitosa campaña de vacunación.
Hasta el momento, más del 53 por ciento de su población que supera los nueve millones de habitantes, ha recibido los dos biológicos de los laboratorios Pfizer/BioNTech.
Desde el pasado domingo 10 de abril, el gobierno tomó la decisión de no usar más estos elementos protectores porque se generó inmunidad.
¿Cómo ocurrió esto en Israel?
Gracias a la vacunación masiva de los habitantes para contrarrestar con el virus que, cambió el mundo entero, lograron su prometido.
Hasta ahora, la Tierra Santa ha sido uno de los primeros países en el mundo entero que, en el pasado año, impusieron el uso de mascarilla.
El ministro de Salud, Yuli Edelstein, envió un comunicado, indicando que, las mascarillas estaban fabricadas para protegerlos durante la pandemia.
Sin embargo, algunos expertos concluyeron que el tapabocas no era necesario en espacios abiertos y por eso, decidió quitar la restricción.
Actualmente, el número de personas infectadas por el virus es bastante baja, todo gracias a la eficiencia en la campaña de vacunación.
No obstante, hizo aclaración sobre el uso del tapabocas seguirá siendo obligatorio en lugares públicos cerrados, como, por ejemplo, centros comerciales.
En el mes de diciembre, el país hizo un acuerdo con la farmacéutica Pfizer, quien le entregó de manera rápida millones de antídotos.
Meses atrás en el país del Medio Oriente se registraron más de diez mil contagios diariamente, ahora, son menos de 200 infectados por día.
En virtud de eso, el Gobierno permitió que, en marzo se abrieran nuevamente las playas, los bares y los restaurantes.
¿Podrán ingresar turistas?
Las autoridades competentes, anunciaron que desde el 23 de mayo podrán ingresar los turistas, sin inconveniente.
Tiempo atrás, cerraron por completo las fronteras para prohibir el acceso de los visitantes, tras el inicio del pico del virus en marzo del pasado año.
Los ministerios de Turismo y Sanidad de Israel, permitieron el ingreso de turistas, siempre y cuando la prueba de PCR saliera negativa.